Nuestra Señora de los Ángeles

El 8 de agosto el Santoral Católico le dedica el día a la Virgen de los Angeles, patrona de Costa Rica y las Américas. Fue hallada en el bosque por una joven mulata llamada Juana Pereira.

Extremista

El 2 de agosto de agosto de cada año el Santoral Católico le dedica el día del calendario a Nuestra Señora de los Ángeles, advocación de la Virgen María cuyo culto se inició en Getafe y fue llevado a América por los conquistadores. El Papa Juan Pablo II la declaró patrona de Costa Rica y protectora del continente americano. Hay templos levantados en su nombre en Italia, España, México, Estados Unidos y Argentina.

En la época colonial, Cartago era la principal ciudad para los españoles en Costa Rica. En 1635, según las leyes, los mulatos libres o pardos no podían pasar de la Cruz de Caravaca.

Según la leyenda, el 2 de agosto de 1635 una joven indígena llamada Juana Pereira iba a lavar ropa y se encontró en el medio del bosque con una pequeña estatua de la Virgen María con un bebé en brazos sobre una roca muy cerca de un manantial en el sitio llamado «La Puebla de los Pardos».

Juana llevó la imagen a su casa y la guardó en un cajón envuelta en un paño de tela. Al otro día, la joven regresó al lugar del hallazgo y se encontró nuevamente una muñeca de piedra igual a la hallada el día anterior, decidiendo hacer lo mismo. Pero al guardarla, se dio cuenta que la Virgen que había encontrado antes, ya no estaba.

Al tercer día volvió a encontrarse en el bosque con la imagen de la Virgen María, por lo que esta vez decidió llevársela al sacerdote Alonso de Sandoval quien la guardó en una caja. Al otro día, al abrirla, ya no estaba. Juana Pereira volvió a encontrar la muñeca sobre la roca, volviéndosela a llevar al cura, quien esta vez la guardó en el sagrario.

Como al día siguiente la imagen había regresado al lugar donde fue hallada, Alonso de Sandoval entendió que era un mensaje de la Virgen María y que quería permanecer en ese lugar, por lo que se le construyó una pequeña capilla donde actualmente se encuentra la Basílica de los Ángeles. Rápidamente a su alrededor se empezaron a agrupar los pardos.

La imagen de piedra con el niño Jesús en sus brazos fue bautizada como Virgen de los Ángeles, dado que el 2 de agosto los franciscanos celebraban la fiesta de Nuestra Señora de los Ángeles de Getafe.

La joven que encontró la imagen se perdió en la Historia de Costa Rica, dado que no se le dio importancia después del hallazgo de «la negrita». El Arzobispo de San José, Monseñor Víctor Sanabria Martínez quiso recuperar datos de esta mulata. En su investigación no pudo encontrar datos precisos, pero detectó que la mayoría de las mujeres de la zona se llamaban Juana y se apellidaban Pereira, por lo que decidió llamarla «Juana Pereira» en homenaje a todas las mulatas que conocieron a la verdadera mujer que se topó con Nuestra Señora de los Ángeles, pretendiendo extender el honor a las culturas aborígenes y afrodescendientes de Costa Rica.

La Virgen de los Ángeles fue nombrada patrona de Costa Rica y las Américas. Además de tener templos en su nombre en el país donde se produjo el milagro, también los tiene en Italia, España, México, Estados Unidos y Argentina.