La justicia detuvo el aumento del subte a 7,50 pesos de julio de 2016

La justicia frenó el aumento en el boleto del Subte de Buenos Aires, que desde el 27 de julio de 2016 pasaría a costar 7,50 pesos.

Extremista

Gracias a una medida cautelar presentada por Facundo del Gaiso, auditor de la Ciudad de Buenos Aires, la jueza Elena Liberatori frenó el aumento en la tarifa de subterraneos que iba a regir a partir de mañana  miércoles 27 de julio de 2016. Metrovías y el Gobierno de la Ciudad planeaba llevar el boleto de 4,50 a $7,50, representando una suba del 66%, por lo que los metrodelegados tenían planeado tomar medidas de fuerza.

La jueza Elena Liberatori dio lugar a uno de los recursos de amparo presentados para frenar la suba del viaje en subte. Según planteó Facundo del Gaiso, habrá que volver a realizar el cálculo de la tarifa técnica, dado que considera que un 66% es excesivo.

De no haberse frenado este incremento, los metrodelegados tenían planeado abrir molinetes de 7:00 a 8:00 horas de la mañana, y un ruidazo en los andenes por la tarde del mismo día, contando con el apoyo de distintos movimientos sociales.

El auditor Facundo del Gaiso había comentado que la tarifa del subte estaba inflada porque se tenía en cuenta factores que no deberían considerarse, como la depreciación del material rodante y los gastos de seguridad y mantenimiento.

La Justicia dio lugar a otros recursos presentados para este mismo fin, tales como los de Marcelo Ramal (partido Obrero-Frente Izquierda), Gabriel Solano (dirigente del PO), Alejandro Bodart (del MST- Nueva Izquierda), y Claudio Delllecarbonara (Metrodelegado).

Si el boleto de subte hubiera pasado de 4,50 a 7,50 pesos (66% de aumento), una persona tendría que gastar al mes $262,50 en caso de tomar dos servicios al día de lunes a viernes, teniendo en cuenta como sería la escala a abonar de acuerdo a los descuentos: del 1er al 20mo boleto, la tarifa sería de $7,50, desde el 21ro de $6, desde el 31ro $5,25 y desde el 41ro en adelante de 4,40 pesos.

Los más perjudicados serían los 1.200.000 trabajadores que a diario ingresan a Capital Federal para dirigirse a sus trabajos, dado que la mayoría debe combinar el viaje con trenes o colectivos, llevando el gasto mensual a al menos $752,50.-